viernes, 2 de diciembre de 2011

COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN

 








COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN: PLAGIOS





            Esta semana hemos estado viendo las distintas maneras de realizar nuestros trabajos sin entrar en el riesgo de que nos acusen de estar copiando las ideas de otras personas y las posibles consecuencias que esto nos pueda acarrear.



            Hay un problema generalizado y es que a los alumnos, en los colegios e institutos, se les exigen trabajos y les informan que una manera de obtener ayudas para su realización es investigando a través de libros, revistas e Internet. Lo que no le dicen es que al utilizar estas fuentes y no citar de donde han sacado la información están plagiando puesto que no les exigen, al entregar los trabajos, la inclusión de una bibliografía. Por tanto, los estudiantes se acostumbran a realizar sus trabajos de forma errónea y no ven nada malo en ello.



            Respecto a lo que se debe o no citar hay unas reglas generales que hay que tener en cuenta.



            Existe información que es de dominio público, la cual no es necesario  citar, un ejemplo de ello sería la fecha de la llegada de Colón a América, la fecha de la Independencia Americana, etc. Estas informaciones pueden ser obtenidas por cualquier persona desde cualquier fuente o las ha podido saber desde su niñez.



            Cuando cogemos la información que pertenece a otra persona y no citamos a quién pertenece, entonces estamos cometiendo un delito de plagio y que incluso está penado por las leyes.



            Hay muchos tipos de plagios: Una es apropiándose de las ideas y citándolas como nuestras. Se da el caso de que algunos libros publicados han sido copiados por otros escritores y algunos de ellos están en pleitos judiciales para compensar los daños producidos a sus creadores.



            Otra manera de plagio es parafrasear las frases para intentar dar la sensación que esas ideas son nuestras. Este método también es un delito y tiene las mismas consecuencias.



            Para ayudar a las personas en la manera de citar las informaciones, evitando tener unas consecuencias desfavorables, existen unas reglas establecidas como son la APA (Asociación Americana de Psicología) o MLA (Asociación de Lengua Moderna). Estas normas nos ayudarán a conocer cuando y como debemos citar  las fuentes de donde obtenemos la información, evitando de este modo cometer una infracción y sus posibles graves consecuencias.

1 comentario:

  1. Yo opino que debe haber, en los centros de primaria y de secundaria, una asignatura como TICS para que, desde pequeños, sepamos usar, de manera eficiente, la información que tenemos a nuestra disposición. No vale de nada esos programas de la Junta de ordenadores portátiles gratis si no se les enseña cómo utilizarlos, ¿no?

    ResponderEliminar